Nombre: Francisco Matthews
Edad: 23
Profesión: Ingeniero Comercial, con Minor en Historia del Arte y magister en Diseño.
Nacido en: Chile
MI LADO CREADOR: Lo que yo hago es trabajar la fotografía y el fotomontaje, trabajo con fotos mías y otros orígenes, las mezclo y armo escenarios que crean realidades armónicas, donde no se nota la edición más allá de lo evidente.
Con mis imágenes intento mostrar lo que muchas veces la gente oculta y siente, nuestros sueños, miedos, dolores y alegrías. Mostrando reflejos auténticos de lo que somos. En mi última colección "Sombras" pretendo mostrar el funcionamiento de la sociedad; donde realmente no hay nada oculto, todo frente a una luz tiene una sombra, una sombra involuntaria, una sombra que no elegimos; que es un reflejo nuestro verdadero y auténtico lo que somos.
El desafío es crear obras con un significado propio pero que cada persona sobre sus experiencias pueda interpretar de manera personal, hacemos una interpretación en conjunto, el espectador y yo.
MI PRÓXIMO PROYECTO: Mi nueva colección aún no tiene nombre, pero con solo una obra publicada, pretende mostrar retratos de espíritu engrandecedor, personajes con actitud envidiable y orgullosos, pero retratados con aspectos físicos curiosos y estereotípicamente “feos”. Para mostrar que la originalidad y la actitud lo son todo, que el aspecto físico no agrega valor y que lo que nos hace únicos es lo único que importa y hay que llevarlo con orgullo.
MIS REFERENTES
1. Gustav Klimt, gran artista austriaco.
2. Karyn Coo, gran diseñadora de modas chilena
3. Mi madre, María Paz Palacios, quien me enseñó el lenguaje del arte y las maravillas que puede hacer.
RECOMIENDO EN CHILE:
1. El Museo Ralli, donde hay una gran colección de artistas latinoamericanos y europeos, es gratuito e increíblemente enriquecedor.
2. El Toro, restaurante icónico de la calle Loreto que ahora abrió en Vitacura, con un ambiente bohemio que te hace sentir en casa, es uno de los mejores lugares para salir a comer en Santiago.
3. Santuario de la Naturaleza, es un icónico parque privado que hace 35 años permite a los santiaguinos salir del ambiente de ciudad y entrar en un espacio donde puedes estar en contacto con la naturaleza y contigo mismo, disfrutando del aire libre.
